En el sur de Corea, se produce una verdadera joya entre los tés verdes: el Woojeon. Específicamente, esta variedad se elabora en la isla volcánica de Jeju Do y las provincias de Jeollanam-do y Gyeongsangnam-do. Justamente, las características específicas de sus suelos influyen en el sabor final de las hojas del té.
Este sabroso té, cuyo nombre significa “antes de las lluvias”, se recolecta de manera temprana, durante la primera quincena de abril, justo antes de Gokwoo, una de las 24 divisiones del calendario lunar coreano, y de que llegue el monzón a Corea. Ahora bien, ¿qué tiene de particular el Woojeon? Descubrámoslo a continuación.
Alrededor del año 668, se introdujo el té en Corea. Cuenta la leyenda que, durante la dinastía Shilla, fueron los monjes budistas quienes llevaron la Camellia sinensis al país en forma de semillas.
Tiempo más tarde, entre los años 918 y 1392, comenzó a crecer la cultura del té coreana. En un principio, el hábito de beber té era común entre los aristócratas y los miembros de la corte de la dinastía Koryo; sin embargo, poco a poco, comenzó a expandirse. Al menos hasta que se popularizó el confucianismo. En ese momento, la cultura tetera del país disminuyó, manteniéndose principalmente entre los monjes budistas.
El renacimiento de la cultura del té en Corea se dio en la década del 80, momento en que aumentó considerablemente tanto el consumo como la producción. ¿Sabías que, en la actualidad, Corea produce casi tanto té verde como Japón? Esto te da una medida del inmenso crecimiento experimentado en los últimos años.
Cabe destacar que en el proceso de elaboración del Woojeon se nota tanto la influencia japonesa como la china ya que se entremezclan los procedimientos de ambos países.
Como todos los tés, el Woojeon se elabora a partir de la planta Camellia sinensis. Como ya mencionamos, a principios de abril comienza la recolección de brotes y hojas pequeñas.
Una vez terminada la cosecha, las hojas se cocinan al vapor o se tuestan en woks para detener, así, la oxidación. Por este motivo, es habitual escuchar que se pregunte si se trata de té Deoukkumcha, es decir tostado, o Jeungjechay, al vapor.
La realidad es que cada compañía de té utiliza un proceso diferente; por lo tanto, el Woojeon puede variar entre un sabor más herbal o más tostado, dependiendo de su procesamiento.
Sea cual sea el método escogido para cortar la oxidación, tras el mismo las hojas se enrollan a mano o con ayuda de máquinas y, finalmente, se terminan de secar para asegurar la conservación de su calidad, sabor, color y aroma.
Merece la pena destacar que esta variedad es difícil de encontrar fuera de Corea debido a que es muy demandado en el país. Se trata de un té exclusivo y de precio elevado.
Antes de degustarlo, presta atención a sus hojas; en este caso, las hebras son oscuras e irregulares, con un intenso aroma vegetal y tostado e, incluso, un leve deje a frutos secos.
Una vez mojadas, las hebras adquieren un color amarillento y la infusión se ve color amarillo-verdoso en taza. De carácter suave y matizado, en boca se siente un poco amarga en un inicio y dulce al final, con una astringencia media y un toque de hierba de limón.
Se trata de un té verde complejo y sofisticado, que sorprende por sus matices tanto aromáticos como en boca. Sin dudas, es perfecto para paladares exigentes.
Si bien no hemos hallado estudios específicos sobre los beneficios para la salud del té Woojeon, se trata de un té verde, así que comparte las propiedades de la familia.
Una de ellas es un alto contenido de antioxidantes, unas sustancias que luchan contra los radicales libres protegiendo al cuerpo del daño oxidativo. Muchos estudios científicos han relacionado los antioxidantes con la prevención de enfermedades degenerativas como el cáncer, el Alzheimer y las enfermedades cardiovasculares, así como también para combatir el envejecimiento prematuro.
Por otra parte, al ser un té verde, ayudaría a mejorar la digestión, sobre todo ante grandes comilonas, y actuaría sobre los efectos del estrés, permitiendo que el cuerpo se relaje.
Al infusionar hojas de té, es muy importante prestar atención a varias cosas: la calidad del agua, la temperatura de ésta, la calidad del té (y la cantidad a infusionar) y, por supuesto, el tiempo de reposo.
En cuanto a la calidad del agua, los expertos suelen recomendar utilizar agua con bajo contenido de cal. No es necesario que optes por agua embotellada, puedes usar la del grifo y, en caso de que sea muy “dura”, se aconseja utilizar un descalcificador.
Por otra parte, la temperatura al momento de infusionar las hojas es esencial para evitar que el té se amargue. Para ello, si eres afecto a beber té, te recomendamos comprar un termómetro, sin dudas uno de los gadgets teteros más prácticos. En el caso particular del Woojeon, la temperatura adecuada es de 80°C y el tiempo de reposo no debería superar los 3 minutos.
Veamos a continuación el paso a paso para preparar una excelente taza de Woojeon en casa:
Ingredientes:
Elaboración:
Nota: si te gusta beber un té verde fuerte, no aumentes el tiempo del infusionado: aumenta, mejor, la cantidad de hojas de té por taza. Recuerda que un reposo excesivo puede amargar tu té verde.
El Woojeon es un té verde diferente, suave y delicado, repleto de matices capaces de conquistar al más complejo bebedor de té. Si tienes la oportunidad de echarle mano, no dudes en probarlo.
Fuentes:
Redactora creativa todoterreno y mamá por tres. Disfruto leyendo y escribiendo desde artículos hasta novelas. Me apasiona viajar y pasar tiempo soñando despierta con mis peques. Amante del mate y el té.