¿Te has dado cuenta? El té verde es un ingrediente cada vez más utilizado en cosmética. No es nada extraño encontrarlo en tónicos, cremas y todo tipo de productos para el cuidado de la piel. ¿Te has preguntado por qué?
Ya te hemos hablado alguna vez de las muchas propiedades que el té verde ofrece para la salud. Una de las razones es su alto contenido en antioxidantes, que lo ha convertido en una bebida famosa para cuidarse e incluso para complementar dietas para adelgazar.
Hoy nos centramos en los interesantes beneficios del té verde para la piel. Simplemente usándolo de manera tópica, puede suponer una ayuda para aliviar diferentes problemáticas de la piel, como el acné o la inflamación.
Es posible utilizar el té verde (aquí te dejamos algunas ideas de tés verdes) como un tónico natural para limpiar la piel, eliminar sus impurezas y ayudar a que esta recupere su elasticidad y brillo habitual.
Repasemos todas la propiedades que lo convierten en uno de los reyes de los productos de cuidado para la piel.
Ya lo mencionamos al iniciar el artículo: el té verde es una gran fuente de antioxidantes.
Estas moléculas combaten el envejecimiento prematuro, ayudando a mantener la piel más joven y tersa y a combatir las arrugas, el daño producido por el sol y otras señales de la edad.
Además, esta variedad de té es muy rica en catequinas EGCG, unas moléculas que una investigación de Medical College Of Georgia ha señalado como la responsable de la reactivación de células moribundas (1). Al aplicarse el té verde de manera tópica sobre la piel, la capa más externa de la misma se vería beneficiada por la actuación de estas catequinas y por ende, rejuvenecida.
Las propiedades antiinflamatorias y antibacterianas del té verde serían las responsables de las palpables mejorías de la piel con acné tras su aplicación tópica.
Son varios los estudios que han encontrado importantes mejoras en los casos de acné tras la aplicación de emulsiones con té verde (2), así que ¿a qué esperas para utilizarlo?
¿Sientes tu piel inflamada? ¿Te molestan las ojeras? Un artículo de JAMA Dermatology ha comprobado la acción antiinflamatoria del té verde (3), una función que ayudaría a combatir las molestas bolsas bajo los ojos, por ejemplo.
El principal problema de la piel grasa es, justamente, la producción de un exceso de sebo que le da brillo y la sensación de suciedad al rostro. ¿La buena noticia? Los taninos del té verde tienen una función astringente que ayudaría a eliminar el exceso de grasa, devolviéndole la suavidad a la piel.
Una investigación del año 2010 analizó la piel de voluntarios masculinos con piel grasa que utilizaron una emulsión de té verde durante varias semanas y concluyó que habían reducido la producción de sebo en un 70% (4).
El té verde es rico en polifenoles y catequinas, dos compuestos con actividad antioxidante que luchan contra los radicales libres para prevenir el daño oxidativo. Diferentes estudios señalan que los antioxidantes protegerían a las células tanto del envejecimiento prematuro como de la aparición de enfermedades crónicas, entre las que se cuenta el cáncer.
Si bien las investigaciones a día de hoy son preliminares, sus resultados son muy alentadores. El Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos recoge los resultados de varios estudios que apuntan que el té verde podría tener propiedades que ayudarían a inhibir el crecimiento y la proliferación de células tumorales (5).
Por otra parte, merece la pena destacar que la oxidación celular es una de las principales causas del cáncer de piel. Al luchar las catequinas para neutralizar este proceso, estarían protegiendo nuestra piel de dicha enfermedad (6).
Por todas estas razones, cada vez son más los tónicos, cremas y limpiadores que incluyen el té verde entre sus ingredientes.
Ahora bien, ¿sabes que es posible preparar tónicos y limpiadores faciales en casa utilizando el té verde como principal ingrediente?
Si infusionas té verde, puedes utilizar el líquido para limpiar tus poros, por supuesto después de dejar que se enfríe. En ese caso, es importante preparar un té concentrado para aprovechar al máximo las propiedades de esta infusión.
Las hebras de té verde usadas para la infusión (incluso aquellas del sobre de té verde) pueden servir para preparar una mascarilla que disminuya los síntomas del acné. Para ello, podrías mezclarlas con algunas gotas de árbol del té y aplicarlas sobre el rostro, dejando actuar algunos minutos, para posteriormente enjuagar y humectar.
¿Otra opción? Agrega las hebras de té verde a tu limpiador facial habitual. Así de fácil podrás beneficiarte de sus propiedades.
Como ves, utilizar el té verde para cuidar tu piel no es tarea difícil. Además, puedes combinar el consumo de su infusión con el hecho de aprovechar posteriormente las hojas.
Prepara este té con cuidado y disfrútalo ya sea como infusión para adelgazar o como cosmético, para verte cada día mejor.
Fuentes:
Redactora creativa todoterreno y mamá por tres. Disfruto leyendo y escribiendo desde artículos hasta novelas. Me apasiona viajar y pasar tiempo soñando despierta con mis peques. Amante del mate y el té.