El té es bien conocido por sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y beneficiosas para la salud.
El té rojo (el preciado pu-erh chino) es una clase de té muy peculiar, no solo por su sabor sino que también por sus efectos para la salud. Esto es debido en gran parte a la fermentación por la que pasa durante su proceso de fabricación.
En éste, levaduras y bacterias actúan sobre la composición del té provocando cambios químicos que afectan su nivel de cafeína, su concentración de antioxidantes y le otorgan sus efectos quemagrasa.
Existen estudios que han descrito como el té rojo reduce significativamente la síntesis de ácidos grasos, o dicho de forma sencilla, que el té rojo reduce la absorción de las grasas de los alimentos por parte de tu cuerpo.
Otro factor importante para los efectos adelgazantes del té rojo es la cafeína presente de forma natural en todos los tés. Debido a ella, nuestro cuerpo segrega hormonas como la epinefrina y la norepinefrina, que se ha demostrado que promueven el movimiento de los ácidos grasos almacenados en las células. Esto provoca que nuestro cuerpo tenga un acceso más fácil a estas grasa almacenadas y promueve su consumo.
El pu-erh tiene un alto contenido de ácido gálico, elemento que se ha mostrado efectivo para generar efectos contra la obesidad en animales. Este estudio de la Universidad de Fukuoka sugiere que la ingesta de té rojo tuvo efectos en la reducción de la circunferencia media de la cintura, el IMC y los valores de grasa visceral y podría ser útil para el control del peso y la prevención del desarrollo de la obesidad.
Otro estudio de la Universidad China de Kunming sugiere que el té rojo atenúa la acumulación de grasa visceral y reduce los niveles de lípidos o lipoproteínas en la sangre. Las conclusiones se basan en estudios sobre animales que deben ampliarse a humanos.
El té rojo es una bebida especialmente beneficiosa para la salud, ya que a los efectos beneficiosos que de por sí tiene el té se le suman los que provienen de su proceso de fermentación.
El té rojo empieza como el resto de los tés, recolectando y secando las hojas de la Camellia Sinensis, a partir de este punto entra en juego la fermentación Wodui. Durante esta, el té compactado en ladrillos se apilan en habitaciones con temperatura y humedad controladas durante meses.
En este medio proliferan hongos y bacterias beneficiosas que otorgan al té rojo su sabor característico y muchas de sus propiedades medicinales.
Todos estos microorganismos beneficiosos pasan a nuestro sistema digestivo cuando bebemos el pu-erh, mejorando la composición de nuestra flora intestinal.
Nuestra flora intestinal está compuesta por billones de microorganismos que desempeñan funciones protectoras, metabólicas y tróficas. Tener una flora intestinal sana juega un papel muy importante en una buena salud general.
Tomar té rojo de forma inadecuada puede hacerte ganar peso en vez de perderlo.
Beber pu-erh ayuda a tu cuerpo a purificarse y eliminar el exceso de grasa. Si lo tomas antes de comer, este efecto depurativo provocará que tu apetito crezca y probablemente acabes comiendo más de lo que deberías.
Para maximizar los efectos beneficiosos del té rojo, debes tomarlo un rato después de comer (pongamos una hora). De este modo actuará eliminando el exceso de grasa que hayas podido consumir y ayudará a tu sistema digestivo a procesar la comida.
El pu’er te ayuda a perder peso incrementando la velocidad de la digestión. Beber té rojo acelera el movimiento de los componentes grasos por tu sistema digestivo haciendo que tu cuerpo no tenga tiempo de absorberlos.
El té rojo, como todos los tés, contiene cafeína, aunque en bastante menor grado que otros debido a su proceso de fermentación. Tomar demasiado puede provocar dolores de cabeza, interferir con el sueño y volverte intranquilo y agitado.
El pu’er en dosis moderadas durante el embarazo o la lactancia no es peligroso, aunque su contenido en cafeína hace desaconsejable excederse en su dosis.
De forma general, tomar un exceso de bebidas con cafeína es desaconsejable para personas diabéticas, con síndrome de intestino irritable o trastornos de coagulación.
Si bien la Medicina Tradicional China ha ganado popularidad en los últimos años en Occidente como terapia alternativa, en China es usada de forma muy habitual. Sus inicios se remonta a hace más de 2500 años y ha sido, durante mucho tiempo, el sistema de medicina estándar de China.
Sus métodos básicos giran alrededor de conceptos como la acupuntura, el masaje, el ejercicio, la dieta y las plantas medicinales. Aquí es donde entra el té rojo.
La Medicina Tradicional China es buena conocedora de las propiedades del té rojo, al que considera una planta medicinal. Concretamente, el té rojo se usa como una bebida purificadora para facilitar la digestión y eliminar toxinas del cuerpo. Se considera una bebida beneficiosa especialmente para el bazo y el estómago. Te preguntarás: ¿por qué es importante esto?
La Medicina Tradicional China tiene un concepto cuya traducción sería “humedad interna” que está directamente asociada con el bazo. El té rojo es considerado un remedio eficaz para prevenir esta afección, que hace referencia a la incapacidad del bazo para transportar y purificar los fluidos corporales. Se manifiesta con síntomas como el cansancio generalizado, mareo, falta de apetito, pesadez en los riñones, dolor articular entre otros.
Otro aspecto interesante de la Medicina Tradicional China es que asocia órganos con emociones. El bazo está asociado con la preocupación. Por eso, factores como concentrarse demasiado, pensar intensamente u obsesionarse son emociones que se considera que debilitan el bazo. Consumir té rojo es una forma de restablecer su equilibrio.
Apasionada por los temas relacionados con la gastronomía y la salud. Me encanta la montaña, correr, la vida activa y mis gatos.