Tu mejor receta de chai latte

Antonella Grandinetti
Antonella Grandinetti
Tu mejor receta de chai latte

¿Eres un enamorado de los sabores del té chai? La verdad es que nosotros también. La combinación de sabores de las especias con el té negro no deja indiferente a nadie.

Hoy venimos a explicarte nuestra receta de chai latte, una variante occidentalizada del té chai que pone énfasis en su cremosidad usando técnicas similares a las que se usan para hacer los espumosos cafés con leche italianos, los famosos café latte. 

Lo básico del té chai

Originario de India, el té chai, también llamado Masala Chai, es una infusión a base de especias combinadas con té. Los indios suelen tomar esta bebida con mucha leche y mucho azúcar, así que suele ser contundente y muy, muy sabrosa.

¿Una curiosidad? Aunque la receta tradicional usa té negro, también pueden utilizarse otras variedades como el té rojo, verde o incluso rooibos. Según el tipo de té base que se utilice, cambiará su sabor y aroma.

Por lo general, la mezcla de especias más habitual para el té chai incluye canela, clavo de olor, jengibre, pimienta, hinojo dulce y cardamomo. No obstante, ¡las opciones son múltiples! ¿Lo mejor? La medicina india considera a las especias una fuente de beneficios para la salud.  Cada variedad de té chai incorpora las propiedades de las especias con las que es condimentada la infusión.

Algunos estudios han investigado concretamente los efectos sobre la salud del té chai. Entre sus beneficios, sus propiedades antioxidantes que ayudarían a combatir el envejecimiento prematuro y el daño de los radicales libres que podría generar enfermedades crónicas, además de estimular el sistema inmunológico y, además, mejorar el aliento (1).

Ahora bien, ¿y el té chai propiamente dicho cómo nació? La verdadera historia de esta reconocida infusión no está clara pero se sospecha que se debe a la fusión de la medicina natural india, que usaba distintas especias para aliviar diversos malestares, con la tradición inglesa del té. La evolución que originó el chai latte se produjo bastante después y se puede decir que es debida a una combinación de influencias. La receta original se transformó para potenciar la cremosidad de la leche, aumentando su papel en la infusión, probablemente para suavizarla y adaptarla a paladares occidentales.

Básicamente, el chai latte es, entonces, un té especiado con bastante leche. Esta suaviza el sabor, eliminando los rastros de picante mientras las especias aromatizan la leche, le otorgan sabor.

Es muy fácil preparar tu chai latte en casa desde cero o, también, a partir de una de las numerosas preparaciones comerciales para té chai. Veámoslo.

especias para hacer chai latte

Una receta para tu chai latte

Por supuesto, puedes conseguir tu mezcla de chai latte en tu herboristería de confianza e incluso, en bolsitas en el supermercado. De hecho, hay preparados que incluyen ya la leche para que solamente debas infusionar y disfrutar.

Com hacer chai latte desde cero en casa

PERO, si deseas sentirte un verdadero creador de sabores y experimentar en casa, puede seguir nuestra receta para disfrutar de un chai latte completamente a tu medida.

Ingredientes

Para dos persona.

Preparación

  1. Coloca todas las especias (salvo el jengibre) en una olla y tuéstalas removiendo para evitar que se quemen. Es muy importante este paso, así que ten cuidado porque si se tuestan demasiado, amargarás tu infusión. Poco a poco sentirás que un intenso aroma inunda tu cocina, eso significa que estás listo para el siguiente paso.
  2. Incorpora el jengibre y las dos tazas de agua. Remueve con una cuchara de madera y cocina a fuego medio durante 5 minutos. Idealmente, el agua debe calentarse sin llegar a hervir.
  3. Después de estos 5 minutos, las especias se habrán infusionado en el agua. Retira la olla de la fuente de calor e incorpora las hojas de té. Cubre la olla y deja reposar durante unos 4 minutos o según las indicaciones adecuadas a la variedad de té que hayas escogido. La idea es preparar un té intenso. 
  4. Mientras tanto, calienta la leche sin dejar que hierva. Batela para que adquiera una consistencia espumosa. Reservala.  
  5. Cuela la infusión y sirve en las tazas, dejando espacio para la leche. Si deseas endulzarla, hazlo ahora, antes de añadir la leche.
  6. Añade la leche con cuidado para mantener la espuma. ¡Listo! Ya tienes tu chai latte casero.

El truco para hacer un buen chai latte

De hecho, existen dos puntos clave para hacer un buen chai latte. El primero es la mezcla de especias y aquí te podemos ayudar poco. Te recomendamos empezar con nuestra receta, pero te animamos a adaptar a tu gusto las cantidades y tipos utilizados. Después de unos cuantos chai lattes preparados, darás con tu propia receta maestra.

El segundo punto fundamental es preparar la leche para que quede bien espumosa. Para hacerlo, existen aparatos eléctricos que lo hacen maravillosamente. Si no tienes espacio para tu cocina, existen también otras formas. Te ponemos un vídeo para hacerlo simplemente batiendo.

Chai latte con preparado

Aquí el truco principal está en la leche. Preparala con cuidado para obtener una mezcla muy espumosa.

Ingredientes

Para dos persona.

filtrando chai latte

Preparación

  1. Calienta el agua y baja el fuego al mínimo antes de que hierva.
  2. Incorpora los 6 gramos de té chai e infusiona durante 3 minutos, sin tapar el recipiente. Debes vigilar que el agua no hierva para no arruinar la infusión. Si observas que empieza a hervir, apaga la vitrocerámica.
  3. Tapa el cazo o la tetera y deja reposar 7 minutos.
  4. Calienta la leche, sin llegar a hervirla.
  5. Sirve dos tazas de chai, colando la infusión para retener en la malla los restos de hojas de té y especias.
  6. Agrega la leche, reservando un poco para preparar la espuma que coronará tu chai latte.
  7. Bate la leche que reservaste hasta lograr espuma y viértela sobre tu chai latte.

Nosotros te animamos a preparar un chai latte casero, verás que es más fácil de lo que parece. Por supuesto, puedes variar el sabor utilizando otra variedad de té base e incluso, incorporando otras especias como vainilla, anís o laurel. Si deseas un té menos graso, utiliza leche desnatada o alguna variedad vegetal. ¿Prefieres un té aún más contundente? En lugar de decorar con espuma de leche, hazlo con nata batida. ¡Deja volar tu imaginación y sumérgete en un mundo repleto de aromas y sabores!


Fuentes:

  1. https://www.naturalmedicinejournal.com/journal/2010-06/anti-inflammatory-and-chemopreventative-effects-chai-tea
Antonella Grandinetti
Antonella Grandinetti

Redactora creativa todoterreno y mamá por tres. Disfruto leyendo y escribiendo desde artículos hasta novelas. Me apasiona viajar y pasar tiempo soñando despierta con mis peques. Amante del mate y el té.

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