Si hay una planta que goza de mala reputación, es la ortiga. Famosa por generar toda clase de irritaciones al menor contacto con sus pelos urticantes, es en realidad sumamente beneficiosa para la salud si se utiliza adecuadamente.
La infusión de ortiga es un remedio habitual, sus acciones terapéuticas se conocen desde la antigüedad y han dado la vuelta al mundo. La medicina natural la utiliza para depurar el organismo, tratar picaduras de insectos e incluso, reducir el estrés oxidativo y aliviar los síntomas de las alergias. Pero estas son tan solo algunas de las propiedades de la ortiga.
Por supuesto, no cualquier ortiga puede utilizarse para preparar una infusión. La suerte ha querido que sea la ortiga más común, la Urtica dioica (llamada habitualmente ortiga mayor) la que cuente con toda clase de efectos beneficiosos para el organismo humano.
Perteneciente a la familia de Urticaceae, esta planta puede alcanzar el metro y medio de altura. Se la reconoce por sus hojas ovales de color verde oscuro con pelillos urticantes, sus flores pequeñas agrupadas densamente y su tallo cuadrangular de color amarillento.
La acción diurética de la ortiga se asocia a su acción depurativa: al aumentar la eliminación de orina, ayudaría a los riñones a eliminar aquellas toxinas que podrían afectar a nuestra salud.
Si bien se necesitan más estudios al respecto, la ortiga se utiliza habitualmente en el tratamiento de la hiperplasia prostática benigna, una condición que dificulta la micción. Los especialistas no saben exactamente a qué componente atribuir esta propiedad pero consideran que puede ayudar a los pacientes con esta enfermedad (1).
La infusión de ortiga con efecto depurativo se logra al hervir en agua las hojas de esta planta durante 15 minutos.
Un estudio alemán concluyó que un extracto de la hoja de ortiga tiene una sustancia antiinflamatoria capaz de actuar sobre las articulaciones, a la vez que presenta una acción analgésica (2). Por eso, la infusión de ortiga suele estar indicada para aliviar los síntomas de la artritis.
De hecho, un estudio publicado en Journal of the Royal Society of Medicine comparó los efectos de la ortiga para reducir el dolor de los pacientes con artritis con un grupo que consumía un placebo. Tras una semana de tratamiento, el grupo que ingería la infusión de ortiga había logrado disminuir los molestos síntomas de dolor e inflamación (3).
Antes y durante la regla, muchas mujeres padecen de fuertes dolores abdominales, dolores de cabeza y retención de líquidos, en fin: el temido síndrome premenstrual. La medicina ayurvédica suele recomendar en estos casos la ingesta de una a dos tazas de infusión de ortigas cada día mientras duren las molestias.
Esto se debe al efecto antiinflamatorio de la ortiga, que actuaría aliviando el dolor y la inflamación provocada por el período menstrual.
Debido a su aporte de hierro, la infusión de ortiga se utiliza hace muchísimos años para combatir la anemia.
Diversos estudios han probado su eficacia a tal efecto (4) pero, por supuesto, si necesitas incorporar hierro a tu dieta, te recomendamos consultar con un médico que te ayude a organizarte adecuadamente.
¿Sabías que beber infusión ortiga ayuda a disminuir los niveles de glucosa en sangre?
Si bien aún no se ha logrado detectar exactamente qué componente es el responsable de dicha actuación, sí se ha comprobado que una molécula presente en ella y denominada UD-1 es capaz de mejorar la absorción de la glucosa (5).
Un ensayo clínico dividió a los participantes, todos pacientes con diabetes mellitus de tipo 2, en dos grupos. El primero recibió extracto de ortiga durante la duración del experimento, mientras que el otro recibió un placebo. ¿Los resultados? Quienes ingerían la ortiga lograron una notable mejoría en el control glucémico (6).
Algunos expertos señalan que la ortiga tienen probados efectos antimicrobianos (7) que lucharían contra cepas específicas de bacterias. Por otra parte, los flavonoides y polifenoles presentes en la planta tendrían la propiedad de ayudar a cicatrizar heridas.
De este modo, la infusión de ortiga podría utilizarse para tratar infecciones bucales, como aftas.
Los antioxidantes presentes en la ortiga ayudan a prevenir el estrés oxidativo, es decir que actúan contra los radicales libres, previniendo el envejecimiento prematuro y la oxidación de las células que podría causas el desarrollo de diversas enfermedades crónicas, como el cáncer o las enfermedades neurológicas (8).
Finalmente, es importante señalar que, a pesar de sus propiedades para la salud, la ortiga está contraindicada en embarazadas, mujeres en etapa de lactancia, personas con tensión baja o padecimiento de alguna enfermedad crónica.
En caso de embarazo, es particularmente importante evitar esta infusión, ya que puede provocar contracciones uterinas.
Por otro lado, la infusión de ortiga puede provocar interacciones con algunos medicamentos relacionados con el tratamiento de la diabetes, la tensión y algunos diuréticos.
Como siempre, te aconsejamos consultar con tu médico cualquier pregunta relativa a tu situación personal.
Ahora que conoces sus beneficios, no dudes en preparar una infusión de ortiga en tu hogar.
Para ello, debes infusionar unos 5 gramos (una cucharada aproximadamente) de hojas secas por cada 200 ml de agua durante al menos 7 minutos. Te recomendamos endulzar la infusión con miel ya que la ortiga podría tener un sabor demasiado amargo para tu gusto.
Fuentes:
Redactora creativa todoterreno y mamá por tres. Disfruto leyendo y escribiendo desde artículos hasta novelas. Me apasiona viajar y pasar tiempo soñando despierta con mis peques. Amante del mate y el té.