¿Te ha llegado ya la locura del bubble tea? Esta bebida de origen taiwanés combina té con las famosas “perlas” de tapioca y ofrece un aspecto espectacular. Instagram, por ejemplo, está literalmente inundada de fotos con interminables variantes del té de burbujas.
Esta bebida es muy popular en países como Japón, donde existen tiendas que se dedican exclusivamente a vender variedades de ella. En los últimos años, estos exóticos establecimientos han abierto las primeras en Madrid y Barcelona.
Ahora bien, ¿qué es exactamente el té de perlas o bubble tea y cómo puedes prepararlo en casa? Continúa leyendo y descúbrelo.
El bubble tea, o al menos en su versión original, es una bebida que combina té negro, tapioca en forma de pequeñas bolas o perlas y algún edulcorante como leche condensada o sirope.
A día de hoy, y después de haberse popularizado en medio mundo, es posible encontrar innumerables versiones del bubble tea elaborados con distintos tipos de té, sin té pero con exóticos sabores frutales, con leche, con leches vegetales, con componentes extra como helado… en fin, una interminable variedad que tienen un elemento en común: las bolitas gomosas (hechas con tapioca, gelatina o incluso agar-agar) que le dan esa característica “masticable” al té.
El té, en su versión original se consume caliente, pero la verdad es que la mayoría de veces es más fácil encontrarlo como bebida fría. Para beberlo, a menudo se ofrece una peculiar pajita, más gruesa de lo normal, para que, al sorber, puedan subir las perlas del fondo del vaso.
A este té se le conoce por varios nombres. En Taiwán, lo llaman té de perlas, en China, té de burbujas. En otros lugares, simplemente té boba, que es el nombre de las perlas de tapioca.
La creación del bubble tea no está clara y al menos dos entidades diferentes alegan ser los inventores. Si bien hace poco tiempo ha comenzado a popularizarse en occidente, la realidad es que el té de perlas no es un invento nuevo, al menos en oriente.
Se cree que fue inventado en la década del 80 en la sala de té Hanlin de Tainan, en Taiwán, cuando a su dueño se le ocurrió incorporar bolas de tapioca al té. Sin embargo, Liu Han-Chieh del salón de té Chun Shui Tang de Taichung, Taiwán, sostiene que fue su gerente de desarrollo de productos quien lo inventó al mezclar una bebida de té helado con fen yuan (un conocido budín de tapioca) durante una reunión de negocios extremadamente aburrida también en los años 80.
De una manera u otra, la bebida se volvió famosa durante la década del 90, primero en Taiwán y luego, extendiéndose por otros países de Asia oriental.
Preparar un té de burbujas en casa es más fácil de lo que se puede pensar, aunque es cierto que son necesarios algunos ingredientes un poco exóticos.
Las perlas de tapioca son básicas para preparar esta receta y seguramente no es de esas cosas que sueles tener en casa ;-). Puedes conseguirlas con relativa facilidad en cualquier tienda con cierta variedad de productos asiáticos o, si no, en proveedores especializados en Internet. También puedes tirar de Amazon para conseguirlas. Créenos, no te costará encontrarlas.
Existen decenas de recetas de bubble tea. Nosotros te ofrecemos la que consideramos básica: la del bubble tea original. Si quieres variar, existen preparados en polvo para preparar bubble teas con sabores a distintas frutas. Usarlos es sencillo, ya que puedes partir de la receta básica que te damos.
Para dos personas necesitarás:
El primer paso es cocinar las perlas de tapioca. Para ello, colócalas en una olla pequeña junto con una taza de agua y hiérvelas durante 10 minutos o hasta que estén tiernas.
Las perlas de tapioca están a punto cuando muestran una consistencia blanca, similar al chicle. Déjalas enfriar un rato dentro de la misma olla y luego enjuagalas con agua abundante sobre un colador para evitar que se peguen entre ellas.
En paralelo, prepara un almíbar denso utilizando media taza de agua y media de azúcar. Para ello, calienta el agua con el azúcar sin dejar de remover. A medida que el agua se evapore, la mezcla irá ganando consistencia. Cuando esté listo, mezcla el almíbar con las perlas de tapioca.
Prepara una taza de té negro como a ti te guste. Normalmente, se usa un té bien concentrado pero si lo prefieres más suave, ¡es tu decisión!
Coloca el té, la leche condensada o sirope, la leche y el hielo en un vaso mezclador y agita vigorosamente durante varios segundos. La idea es lograr que se forme la clásica y llamativa espuma burbujeante tan típica de esta bebida.
Ahora llega el momento de montar tu bubble tea. Para ello es necesario que cuentes con un vaso alto, una pajita ancha y todos los ingredientes listos y dispuestos sobre la mesa. Sirve primero las perlas de tapioca en el fondo del vaso y por encima, hielo. Agrega la bebida que has preparado con el vaso mezclador, sin dejar caer los hielos ya utilizados. Corona conla pajita y ¡a disfrutar!
El bubble tea se presta a muchas, muchas combinaciones y experimentos. Tomando el método de preparación anterior como base, puedes jugar con las siguientes variables.
En vez de té negro, puedes usar otros tipos de té. Eso sí, te recomendamos que optes por tés con un perfil de sabor intenso.
Uno de nuestros favoritos, que además se presta mucho al dulce, es el té matcha. Para preparar un bubble tea con matcha, prepara las perlas, ponlas en un vaso grande y añade un chorro de caramelo líquido. A continuación, pon medio vaso de leche (puede ser de vaca o vegetal). Por último, prepara a parte una taza de té matcha. Recuerda tamizar el té y batir bién para generar esa espuma tan especial del matcha. Aquí te dejamos una guía por si acaso.
Finalmente, añade la taza de té al resto de la preparación.
Otro elemento con el que puedes jugar es con el sabor de las perlas de tapioca. Mango, melocotón, arándano… La mayoría de marcas venden diferentes versiones que puedes combinar a tu gusto.
Aunque la mezcla de té negro y leche es un auténtico clásico que le da esa cremosidad tan cautivadora al bubble tea, puedes pasar totalmente de la leche y probar con zumo de fruta.
Busca equilibrar el tipo y volumen de zumo para que el sabor del té no se pierda. A nosotros nos gusta especialmente con zumo de melocotón o de pera, que siguen siendo dulces y continúan aportando cremosidad al conjunto.
Quizás te parezca que esto es llevar el bubble tea al extremo, pero siendo una bebida veraniega, es inevitable pensar en combinaciones con helado.
En este caso puedes eliminar la leche. Sirve las perlas de tapioca en un vaso, pon un chorrito de caramelo líquido y cúbrelo todo con una taza de té frío. Te recomendamos que pruebes con earl grey, que aportará su toque cítrico. Finalmente, añade una bola de helado de vainilla.
Ex-qui-si-to.
¿Estás preparado para disfrutar de estos cremosos tés de perlas? Recuerda consumirlos con moderación ya que la tapioca aporta una buena cantidad de carbohidratos y los demás ingredientes están cargados de azúcar.
Redactora creativa todoterreno y mamá por tres. Disfruto leyendo y escribiendo desde artículos hasta novelas. Me apasiona viajar y pasar tiempo soñando despierta con mis peques. Amante del mate y el té.